Historia del Colegio
Por Decreto de 27 de enero de 1956, se crean los Colegios de Facultativos de Minas y Fábricas Mineralúrgicas y Metalúrgicas, antecesores de los Ingenieros Técnicos de Minas y de acuerdo con el art. 5 de la Orden de 12 de marzo de 1957 que define los Estatutos Generales de estos colegios, el territorio del Colegio de Oviedo abarcaba las provincias de Asturias, La Coruña, Lugo, Orense y Pontevedra.
Durante las décadas de los 70, 80 y 90, los ingenieros técnicos de minas de las cuatro provincias gallegas, realizaron varios intentos de segregación del Colegio de Oviedo sin éxito, al principio porque no había suficiente número de colegiados para constituir un colegio independiente, otras veces por defecto de forma al solicitar la segregación y en definitiva porque al Colegio de Oviedo no le interesaba y utilizaba el peso de su influencia en el Consejo Superior para que esta segregación no se llevara a efecto.
El último y definitivo intento de segregación se lleva a cabo en 1997, publicándose por el Ministerio de Industria y Energía en el B.O.E. de 11 de octubre de ese año, el Real Decreto 1503/1997, de 26 de septiembre, por el que se acuerda la segregación de las Delegaciones de La Coruña, Lugo, Orense y Pontevedra del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos de Minas de Oviedo.
La constitución del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos de Minas de Galicia, se realiza por Decreto de 13 de Noviembre de la Consellería de Justicia, Interior y Relaciones Laborales de la Xunta de Galicia, siendo publicado en el D.O.G. de 24 de noviembre de 1997.
El 13 de diciembre de 1997 se celebra la Junta General constituyente del Colegio de Ingenieros Técnicos de Minas de Galicia, eligiéndose una Junta de Gobierno constituyente formada por Decano, Vicedecano, Secretario, Tesorero y cuatro vocales, que tendría como cometido principal, aparte del funcionamiento administrativo y económico del Colegio, la convocatoria de elecciones.
En octubre de 1998 se celebraron las primeras elecciones, eligiéndose una Junta de Gobierno de 12 miembros compuesta por Decano, Vicedecano, Secretario, Tesorero y ocho vocales, dos por cada provincia, siendo elegido Jesús Lozano Villa, que había presidido la Junta anterior, como primer Decano del Colegio.
Tras un periodo turbulento, en el que dimitieron varios miembros de la Junta de Gobierno y tras una moción de censura celebrada en septiembre de 2000, se hizo cargo de la dirección del Colegio una Junta Gestora que convocó elecciones que se celebraron en enero de 2001, siendo elegida una Junta de Gobierno que estaba presidida por Juan Pedro García de la Barrera Castellanos.
Esta Junta de Gobierno acometió una reforma colegial completa que quedó plasmada en los Estatutos que fueron aprobados por la Junta General el 15 de junio de 2002 y publicados en el D.O.G del 7 de enero de 2003.
Tras la aprobación de los Estatutos, que fijaba una Junta de Gobierno de ocho miembros con un solo vocal por provincia, se celebraron elecciones a todos los cargos, manteniéndose en los mismos, la mayoría de los colegiados que los ostentaban.
La Junta de Gobierno acometió el segundo gran reto colegial, fijar la capitalidad en Santiago de Compostela, tal y como se especificaba en los Estatutos y así el 5 de noviembre de 2004, fue inaugurada en Santiago de Compostela la nueva sede del Colegio, en un local de nueva construcción con espacio para las oficinas y un salón de actos.
Durante el periodo siguiente el Colegio fue creciendo en número de colegiados y se aprobaron normativas y reglamentos, que fijaron la base de funcionamiento del Colegio en sus relaciones y servicios a los colegiados, realizándose varias elecciones que fueron renovando parcialmente los cargos de la Junta de Gobierno, también se establecieron relaciones institucionales con la Administración y otros organismos.